
Claro está que no llegan todavía a este extremo porque poca gente les daría apoyo. El modelo de educación diferenciada está reconocido internacionalmente y lo practican no sólo colegios católicos -como la izquierda, tan amiga de las generalizaciones abusivas, predica- sino muchos otros de instituciones laicas, tanto de iniciativa privada como pública. Un buen panorama sobre esta opción educativa puede leerse en http://www.diferenciada.org/.
En mi opinión, educar a niños y niñas en aulas distintas tiene ventajas e inconvenientes a hacerlo en clases mixtas. Hay estudios pedagógicos que parecen demostrar que el desarrollo intelectual de niños y niñas tiene ciclos vitales distintos (vease por ejemplo http://www.education.com/reference/article/Ref_Cognitive_Gender/), por lo que parece lógico que tengan también ritmos de enseñanza diferenciados. Las clases mixtas ayudan a reconocer las fortalezas y debilidades de ellos y ellas, a prepararse para convivir en un mundo que es mixto. Las clases diferenciadas mitigan algunos factores de perturbación y competencia, singularmente vivos en la adolescencia. En definitiva, me parece que ambas son perfectamente válidas, por lo que la elección entre uno y otro modelo debería ser una opción de los padres, en función de sus propias convicciones. Lógicamente, eso requiere que existan alternativas, colegios con distintos modelos: soy bastante reacio al pensamiento único.
No conozco ningun partidario de la educación diferenciada que defienda que éste se convierta en opción universal. No veo por qué los partidarios de la co-educación sean tan beligerantes por excluirla. Supongo que se trata de manías educativas, y las manías mejor dejarlas en la esfera personal: acumularlas socialmente acaba por generar sociedades desequilibradas.
Sr.Chuvieco: En mi opinión, la cuestión no está en qué modelo es mejor que otro, sino que siendo la educación diferenciada un modelo legítimo, conforme en España y autorizado de acuerdo con la Convención de la UNESCO aprobada el 14 de diciembre de 1960 puesto que el Estado la admite, debe ofrecerse también para los padres que la queremos para nuestros hijos y no podemos costearnos carísimos colegios privados, ya que de lo oontrario, como apunta en su comentario, se nos reduce a cenizas nuestro derecho a elegir la educación que queremos para nuestros hijos, dejando así que los poderes públicos, en función de su ideología, decidan por nosostro. Un grupo de familias nos hemos levantado contra el atropello que supone la retirada de golpe y porrazo de los fondos públicos que sustentan este tipo de colegios. Le invito a conocer nuestro blog: htp://porladefensadelalibertad.wordpress.com/
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